jueves, 24 de noviembre de 2016

Una aventura sin fin

Basado en Marcos 1: 1 - 8
Hoy fuimos a visitar a Juan en el desierto. Él vive solo en un lugar apartado a orillas del río Jordán. No fue muy difícil encontrarlo ya que mucha gente caminaba hacia este lugar.
Por fin conocimos a Juan. Es una persona admirable, vive de una manera muy humilde, pero se nota que es alguien instruido y habla con poder, de una forma que antes me era ajena por completo.
No tiene miedo de nadie ni busca adular a la gente. Sólo respeta a Dios, y por supuesto, al Mesías. Está convencido de que no tarda en venir, y de alguna forma extraña todos compartimos esa misma esperanza.
Hoy también pasamos por las aguas del bautismo luego de oír predicar a Juan. Algo especial dentro nosotros nos hizo sentir dolor y culpa por nuestros pecados y es maravilloso sentirse perdonado.
Señor, no dejes de trabajar en mi interior, quiero más de ti, sé que no será fácil, pero en verdad quiero conocerte y recibir ese bautismo que me tienes preparado, gracias por llamarme y darme la oportunidad de acercarme a ti. Amén

No hay comentarios:

Publicar un comentario