domingo, 25 de marzo de 2018

Un gran sueño...


A más de uno le da una razón para seguir luchando en este mundo, alcanzar aquéllo con lo cual hemos soñado por tanto tiempo…

Lo malo de todo este dilema es que, a pesar de todos los inventos y avances tecnológicos, aún debemos aprender a esperar, y muchas veces, en esa espera interminable pareciera que erramos el camino y nunca lograremos alcanzar el objetivo soñado.

¿Es que sólo hay chance para aquellos pocos afortunados que nacieron en cuna de oro o tuvieron la buena dicha de no equivocarse nunca?

Puede que no, después de todo, en esta vida no siempre 2 más 2 son 4, y hay sueños imposibles que se han logrado sin siquiera "trabajar en ellos”.

☆Un esclavo y preso que llegó a ser gobernador de un país al cual ni pertenecía.

☆Un viejo de 80 años que trabajaba para su suegro que se convirtió en escritor de renombre y libertó a millares de esclavos.

☆Un pastor de ovejas que se convirtió en el rey de su país.

☆Simples pescadores que cambiaron la forma de pensar de todo su mundo conocido...

Y muchos otros que como ellos, dejaron y siguen dejando una huella en el mundo.

Pero podríamos pensar: No es justo, yo si me sacrifiqué por mi sueño y a diferencia de ellos, no he logrado nada…

Entonces viene a mi mente el inicio de una canción infantil:

“Eliseo estaba arando cuando Elías lo llamó,

Y le dijo: Otro campo hoy te ha preparado Dios…"

Y aunque simple, el hecho se repite en cada una de estas personas; cuando dieron el paso definitivo para el cumplimiento de sus sueños, todos ellos estaban trabajando.

☆José trabajaba en la cárcel.

☆Moisés cuidaba las ovejas de su suegro.

☆David cuidaba el rebaño de su padre.

☆Pedro, Santiago y Juan estaban pescando.

¿Y tú?

No importa cuál sea tu trabajo,

tampoco importa el salario (incluso si no existe),

o si eres dependiente o no,

ni tu edad, o tu nivel educativo…

Y entonces concluyo: Si “Mente ociosa taller del diablo”, entonces “Mente y manos ocupadas, instrumento útil en las manos de Dios”

Recuerda:

"Todo lo que te viniere a la mano para hacer, hazlo según tus fuerzas, porque al Seol, a donde vas, no hay obra, ni trabajo, ni ciencia, ni sabiduría."

Eclesiastés 9: 10

martes, 13 de marzo de 2018

Vueltas y vueltas...

Hiciste buenas decisiones en tu vida.
Al parecer todo fue correcto.
Pero no se ven frutos...
Tan solo parece que estás ahí, dando vueltas sin sentido, sin ir hacia nada concreto.
¿Hay alguna productividad en vivir dando vueltas?
Todos dirían de buenas a primeras que -NO-.
Pero detente un momento y retrocedamos juntos en el tiempo.


Se ve venir hacia la ciudad amurallada, un gran ejército listo para atacar, han venido de ganar varias guerras. Y ante esta desafiante amenaza, la ciudad cierra sus puertas y se prepara para atacar desde las murallas. Pero el ejército no se acerca lo suficiente, tan solo, sin salir de sus filas, ni hacer más ruido que el de su marcha, dan una vuelta a la ciudad y dando media vuelta desaparecen en el horizonte...
Muchas preguntas surgen en los hombres de la ciudad, y también en los soldados del ejército que hizo la marcha, pero órdenes son órdenes y todos obedecen sin cuestionar.
Al día siguiente, se vuelve a repetir la misma historia, y así por seis días. Una vuelta a la ciudad y volver al campamento.
Tan sólo el orden de la marcha silenciosa y una gran expectativa...
Pero...
¿Qué van a lograr dando vueltas?
Llega el séptimo día, esta vez el ejército madruga, todos pensarían que para atacar, pero no. Nuevamente para dar vueltas, y esta vez,  no tan sólo una, sino dos, tres, cuatro, cinco, seis y hasta siete, y sin duda para el espectador, lo único que conseguirán es terminar agotados, han hecho la marcha de una semana entera en un día, ya se irán a descansar, y todo seguirá igual.

Pero, a la orden, como si fuera un solo hombre, el gran ejército para frente a la ciudad. Unos hombres vestidos de blanco levantan sus cuernos y dejan oír las bocinas de forma prolongada, y allí mismo surge un grito, un grito reprimido por siete días, un grito de guerra. 
¡Ha llegado el momento!
Una fuerza misteriosa derriba las murallas, y un ejército que debería estar cansado, avanza con las fuerzas renovadas, va con prisa para culminar su tarea, y obtener la mayor victoria bélica que el mundo haya conocido, la victoria que se ganó dando vueltas en silencio.a culminar su tarea, y obtener la mayor victoria bélica que el mundo haya conocido, la victoria que se ganó dando vueltas en silencio.

¿Por qué?
Porque Dios se especializa en usar métodos ilógicos, y poco convencionales para conseguir resultados sorprendentes, y puede usar hasta las vueltas "inútiles" de tu vida para darte una victoria sorprendente.
"Emuna"= ten fe, en esta vida no existen las casualidades, para Dios todo tiene su propósito, hasta el simple hecho de vivir "dando vueltas".